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10/10/2018
En España la investigación sobre la prevalencia de trauma es insuficiente, y más aún si se trata de personas con un trastorno psiquiátrico grave. En este contexto, Fundación Manantial, junto con la Universidad Complutense de Madrid y la Universidad de Boston, han realizado un estudio para determinar y evaluar la relación existente entre experiencias traumáticas y el desarrollo futuro de un problema grave de salud mental.
Según las conclusiones del estudio, en el que han participado 323 personas atendidas por Fundación Manantial, la exposición a situaciones traumáticas puede facilitar el desarrollo de trastornos mentales graves. En concreto, el 84,2 % de las personas evaluadas declaró haber sufrido al menos un evento traumático a lo largo de su vida y el 38,4 % manifestó malestar emocional intenso relacionado con situaciones traumáticas vividas en el pasado. Sin embargo, ninguna de estas personas había recibido tratamiento, sumando al propio sufrimiento psíquico consecuencia de la psicosis un problema continuamente presente, pero olvidado.
La pérdida de un ser querido, seguida de los abusos sexuales en la infancia, fueron las principales causas del trastorno por estrés postraumático en la población con problemas de salud mental. La falta de detección y tratamiento de las repercusiones de las experiencias traumáticas en las personas que presentan un trastorno mental grave puede generar un inmenso sufrimiento.
Cada año se diagnostican en España 10.000 nuevos casos de psicosis, con especial incidencia entre los jóvenes. A pesar de que existe evidencia científica de que la atención temprana reduce los ingresos hospitalarios, mejora el funcionamiento psicosocial y laboral de los jóvenes y supone un ahorro al sistema sanitario, la mayoría de las personas con primeros episodios psicóticos no acceden a este tipo de tratamientos intensivos, integrales y especializados.
La protección y la promoción de la salud mental en los niños y jóvenes reduce la posibilidad de desarrollar un problema de salud mental en el futuro. Por ello, Fundación Manantial puso en marcha la Unidad de Atención Temprana (UAT), un proyecto piloto pionero en España desarrollado por la Fundación y el Servicio Madrileño de Salud con la colaboración de la Obra Social “la Caixa”.