Blog Fundación Manantial
Blog Fundación Manantial
10/01/2018
Mi experiencia en las carreras populares comenzó casi a la vez que mi rehabilitación laboral en el Centro de Rehabilitación Laboral “Hortaleza”. Empecé en el taller de jardinería a finales del 2011 y la primera carrera organizada por la Fundación Manantial se celebró a principios del 2012.
Me preparé esa carrera concienzudamente, así como las 6 siguientes ediciones. Aprendí el valor del sacrificio, el esfuerzo y la dedicación. Aumenté la distancia paulatinamente de 5,6 a 10km. Cuanto más y mejor entrenaba, siempre sólo y de forma autodidacta, más mejoraba física y mentalmente. Pero no todo era correr sin más, también debía cuidar alimentación (verdurita y fruta on, malos hábitos off). Ya saben: ´mens sana in corpore sano´. Ah, se me olvidaba, cabeza la mía, que recuperé el hábito de lectura orientado al inigualable género teatral del llamado siglo de oro: de Molina, Ruiz de Alarcón y Calderón de la Barca, entre otros. Aunque mi preferido sea Valle-Inclán y su esperpéntica escritura.
Quiero agradecer a todos los psicólogos y profesionales de jardinería y oficios especialmente, sin desmerecer a todos los demás, que me ayudaran a creer en mí, cosa bastante difícil porque soy muy poco de creer en mí, sinceramente.
Para terminar, una pequeña anécdota, que espero refleje todo lo anterior:
La quinta edición, camiseta técnica amarilla 10km, se celebraba el día anterior a la carrera la final de Champions entre Real Madrid y Atlético de Madrid, o sea que yo, o celebraba o me iba a dormir pronto, pero correr iba a correrla.
El partido acabó como acabó: el Real Madrid ganó aquella final y los atléticos nos fuimos pronto a dormir. Yo, paradójicamente, estaba 0,01% contento ya que mi madre, recientemente fallecida en el 2017, era acérrima seguidora merengue; la felicité, le di un beso muy grande y me fui al sobre.
Ya por la mañana me levanté muy pronto para desayunar fuerte e ir andando a la carrera que se celebró en el Parque Juan Carlos II. Ni corto ni perezoso me puse mi pantalón de entrenamiento del Atlético de Madrid, con escudo grande incluido. Pasara lo que pasara en el partido, tenía previsto llevar la camiseta de Fundación y el pantalón del Atleti.
Los madridistas fueron de celebración, ellos con su equipación completa del equipo campeón y muy pocos con la camiseta amarilla de la carrera. Salí el último, como siempre hago, ya que no soporto las aglomeraciones y, poco a poco, fui adelantando uno a uno y varios a varios a casi todos los madridistas. No gané de puritito milagro jeje… Es broma, me conformé con hacer mi carrera, adelantar madridistas y terminarla: es decir, concentrarme en lo mío.
“Ole, ole y ole» grité en la entrega de medallas a los campeones, y aplaudí a rabiar a estos por su esfuerzo, dedicación y entrega.
Después, como hice la noche anterior, me fui a la cama a dormir y soñar que algún día el Atlético ganará una Champions.
Felices fiestas.
David Ricardo Prada López
Corredor y usuario
Deja una respuesta